¿Qué beneficios puede generar el deporte para el desarrollo de los países?
Todo el mundo piensa, de manera intuitiva, que el deporte tiene efectos positivos sobre la salud, la cohesión social o la economía. Pero ¿qué sucede en realidad? En un reciente estudio, dado a conocer el pasado mes de noviembre, revisamos más de 90 publicaciones sobre el tema y pudimos identificar siete vectores a través de los cuales el deporte puede impactar al desarrollo de los países: la economía, la educación, la salud, la inclusión, las migraciones, el medio ambiente y la cohesión social.
La conclusión es que, en efecto, el deporte conlleva impactos positivos para los países en desarrollo. Por ejemplo, a nivel económico, organizar una Copa Mundial de Futbol o los Juegos Olímpicos por lo general implica, para el país huésped, un aumento del crecimiento económico, de las oportunidades empresariales y de nuevos empleos. En cuestión de cohesión social, un estudio sobre futbol demuestra que este deporte es un medio eficiente para reducir las tensiones étnicas en África.
Otros efectos positivos: el deporte favorece el empoderamiento de las mujeres, permite concientizar a los jóvenes sobre los problemas de salud pública y aumenta los flujos financieros hacia los países africanos gracias a los deportistas de alto nivel que se han ido al extranjero.
Algunos beneficios parecen más moderados…
Es cierto. Por ejemplo, los beneficios del deporte que se promueven con motivo de la organización de grandes eventos por lo general se limitan al corto plazo: un estudio ha demostrado que los puestos de trabajo creados en relación con grandes proyectos, en la mayoría de los casos, son ocupados por trabajadores extranjeros y desaparecen después del evento.
En cuestión de medio ambiente, se observa que las poblaciones pueden ser desplazadas y el ecosistema sufrir degradaciones debido a las obras relacionadas con las competencias de gran importancia. Por otra parte, no hay una disposición para llevar a cabo estudios de impacto medioambiental y social de manera sistemática. De hecho, estos problemas suelen ser comunes a los países en desarrollo y a los desarrollados.
No obstante, se observa una creciente concientización sobre el tema. Para la organización de sus eventos, las federaciones internacionales como la FIFA o el Comité Olímpico Internacional (CIO, por sus siglas en francés) aplican normas cada vez más estrictas a nivel medioambiental.
En términos de salud, si el deporte para todos puede ayudar a crear buenos hábitos sanitarios gracias a educadores bien capacitados, el deporte de alto rendimiento puede generar problemas de dopaje y de equilibrio psíquico de los niños cuando éstos son seleccionados a muy temprana edad.
Sin embargo, la principal indicación del estudio concierne la falta de datos relacionados con este tema, tanto a nivel cualitativo como cuantitativo. A menudo, las investigaciones publicadas se basan en pequeñas muestras que corresponden a contextos o lugares específicos y que, por lo tanto, no es posible extrapolar. Por ello, resulta difícil sacar conclusiones definitivas sobre cada impacto positivo y negativo del deporte en los países en desarrollo. Será necesario realizar un trabajo de recolección de datos a largo plazo.
¿Qué otras preguntas se plantean los investigadores en relación con este tema emergente?
Aún quedan por explorar varios aspectos: ¿Cómo lograr que perduren los empleos y la industria que se generan en torno a los grandes eventos deportivos? ¿Cómo mitigar la degradación del medio ambiente? ¿Qué impactos genera la organización de una competencia como la Copa Africana de Naciones?
También sería interesante determinar en qué medida la práctica de un deporte influye sobre los resultados escolares. Sabemos que mejora la concentración y las capacidades cognitivas de los alumnos en los países desarrollados. Pero ¿qué sucede en los países en desarrollo?
Cabe recordar que la AFD ha sido de los primeros organismos en utilizar al deporte como herramienta para el desarrollo. Se han firmado acuerdos de asociación con la NBA y con la FIFA. Se lanzó una convocatoria de proyectos con la ONG "Guilde Européenne du Raid" y durante el primer semestre de 2020 se lanzará una plataforma para facilitar el contacto entre los actores del sector. Además, a finales del pasado mes de junio, la AFD presentó su planteamiento metodológico del desarrollo desde la perspectiva del deporte a los miembros del club IDFC, que reúne a 24 bancos de desarrollo de todo el mundo. Ya existe interés. Ahora esperamos que el entusiasmo, al igual que un mejor conocimiento de los problemas planteados, vayan en aumento.