La planta fotovoltaica situada a mayor altura en el mundo

El gobierno boliviano modifica su mezcla energética a favor de las energías renovables. La AFD lo apoya en ese proyecto con la construcción de una planta solar fotovoltaica. El objetivo: aumentar la parte correspondiente a las energías renovables y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero.

Contexto

A pesar de que el gas natural sea la principal fuente de ingresos del Estado boliviano y que la producción de electricidad provenga de centrales térmicas, Bolivia inició el desarrollo de proyectos de energías renovables, utilizando, por ejemplo, la energía solar, ya que el altiplano tiene uno de los niveles de radiación más altos del mundo (entre 5,7 y 7 KWh /m2/día).

En este contexto, ya existen plantas solares fotovoltaicas conectadas a la red eléctrica del país, entre las cuales una planta de 5 MW en Cobija (en el norte del país) y otra planta con 60 MW de potencia en Uyuni (en el sudeste). Estos proyectos fueron financiados por la Cooperación Danesa (DANIDA) y son ejecutados por ENDE, el operador nacional de electricidad que asegura un 72% de la producción del país.

Descripción

La AFD cofinancia junto a la Unión Europea y el Banco Central de Bolivia, la construcción de una planta solar fotovoltaica con una potencia instalada de 100 MW, a 45 km de la ciudad de Oruro (Oeste). Este proyecto corresponde a la planta de producción solar fotovoltaica de gran capacidad más alta del mundo. La planta permitirá desarrollar la experiencia nacional en construcción, explotación y mantenimiento de las plantas solares y, asimismo, demostrar la capacidad del país en desarrollar las energías renovables.

Por su carácter demostrativo y piloto, el proyecto se complementa por una subvención de inversiones y un programa de asistencia técnica sectorial financiados por la Unión Europea (LAIF). El monto total del proyecto es de 86 millones de euros, de los cuales 60 millones son un préstamo de la AFD, 8,5 millones corresponden a la subvención LAIF de la Unión Europea y 17,5 millones vienen del Banco Central de Bolivia.

Impactos

Este proyecto apoya la diversificación del mix eléctrico boliviano y contribuye así a un desarrollo económico sostenible y bajo en carbono en Bolivia:

Consolidación del abastecimiento energético del país;
Reducción de las emisiones de GEI: 100 000 toneladas de CO2/año;
Generación de ingresos para el país (relacionados con el aumentode las exportaciones de gas y la creación de empleos) ;
Inyección de 90 GWh a la red eléctrica durante la fase (a partir de la inauguración en septiembre del 2019).

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